Dios te llenó de potencial; eso es el poder del ser. El poder del ser activa el poder del saber.

Dios te va a dar muchísimos caminos para llegar a tu destino. Cuando un camino no te funcione, Dios te va a mostrar otros. 

Si piensas que ya hiciste todo, tengo una buena noticia; todo no está hecho. Acuérdate que todo lo puedes en Cristo. Feli. 4:13

Busca un mentor, aprende de la gente que va delante de ti, en la carrera. Necesitas a alguien que te recuerde quien ya eres en Dios. Dios te ha hecho capaz para lograr todo. A todos los sueños que están en tu corazón los vas a alcanzar. No busques la aprobación de la gente, Dios ya te ha aprobado. 

El poder del saber te lleva al poder del parecer. Parecer es lo que mostramos. Lo que tú muestras tiene que reflejar quién eres.

Cuando lo llamaron a David, él tenía buena presencia, estaba bien vestido y arreglado. Él sabía quién era. 

Vístete bien, arréglate; ese es el poder del parecer.

Parecer no es engañar, sino mostrar lo que ya somos.

Dios no mira lo que mira el hombre, pero el parecer tiene que reflejar lo que Dios ha dicho que eres.

Dios mandará a alguien para afirmarte.

El papá no lo afirmó a David, sus hermanos tampoco; pero Dios mandó al profeta Samuel.

Dios va a mandar a alguien; no importa que no sea de tu familia; alguien vendrá con una palabra del cielo para recordarte lo que Dios ha dicho que eres.

¡Estás capacitado para todo!

Todo lo de Dios, empezará cuando sea afirmado.

El profeta se equivocó 7 veces cuando fue a ungir a David, porque pensó que el escogido estaba entre sus hermanos; pero luego mandó a llamar a David.

Cuando habían mandado a llamar a David, el profeta le dijo al padre: ‘no empezaremos hasta que él no esté acá.’

Dios no va a empezar las cosas grandes hasta que tú no estés.

eres lo que Dios ha dicho que eres.

Después que el profeta ungió a David el poder de Dios cayó en él, porque todo empieza cuando sepas quién eres.

Cuando David fue a pelear contra Goliat, vio que Goliat era pura apariencia y sabía que eso no funcionaba.

Cuando mi corazón se alinea a quien es Dios y yo sé quién soy, las cosas comienzan a suceder.

Morón; dice el Señor: «Brillarás, a donde vayas darás luz. Alumbrarás el camino a los que no ven y darás el calor a los que están desnudos. Soltaré una ola de milagros en Morón. Te voy a respaldar.»

Lo que ya eres se activará y comenzará tu reinado. 

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón.

Oremos: Padre deseo, ser lo que tu dices que soy; ayúdame por favor a encontrar mi parecer y mi afirmación en ti. En Cristo Jesús amen y amen.

Ps. Cáceres